martes, abril 16, 2024
Home > Artículo semanal > Punto Cero, la casa de Fidel Castro ya no es un secreto

Punto Cero, la casa de Fidel Castro ya no es un secreto

Que Pokémon Go haya sido vinculado con Punto Cero, aunque de burla, quizás sirva como reconocimiento de que la fuertemente resguardada propiedad donde vive Fidel Castro, en un poblado costero del oeste de La Habana, ha ganado fama mundial.

Alfonso Chardy

La página de Internet satírica cubana El Lumpen publicitó la “noticia” el 19 de julio de que un individuo fue detenido por entrar a Punto Cero mientras jugaba el popularísimo juego para teléfonos móviles.

“Melanio Arrozarena, natural de Guanajay, fue arrestado ayer cuando fuerzas de Tropas Especiales lo sorprendieron cuando saltó la cerca del ala este de Punto Cero”, informó El Lumpen. “Según su abogada defensora, que fue asignada de oficio, Melanio estaba jugando Pokémon Go cuando se le aparecieron varios, en la citada dirección, ‘detrás del muro’, y Melanio decidió saltar la cerca para capturarlos”.

Nada de esto ocurrió, porque todo fue una de las muchas farsas que publica El Lumpen, pero sirvió para confirmar que el anteriormente ultrasecreto lugar es en la actualidad quizás tan conocido como El Castillo del Morro, a la entrada de Bahía de La Habana.

Cuando Fidel Castro cumpla 90 años el sábado 13 de agosto, es más que probable que su familia lo celebre en Punto Cero, que no es una casa sino un vasto complejo de casas, edificios y terrenos que se asemejan a una comunidad cerrada o una base militar.

Ahí vive Fidel Castro con su esposa, Dalia Soto del Valle, sus ocho hijos y muchos nietos. Es también su lugar favorito para recibir a algunos visitantes destacados, como al Papa Francisco y la ex presidenta de Argentina Cristina Fernández de Kirchner.

Punto Cero fue habilitado para Castro y su familia en la década de 1970 en propiedades que antes de la revolución cubana en 1959 pertenecían a un antiguo campo de golf, fundado originalmente hace más de 90 años, antes de que naciera Castro en el pueblo de Birán en el oriente de la isla.

El lugar, conocido entonces por muy pocos fuera del circulo de la familia Castro, salió intempestivamente a la luz pública en un video que la ex novia de uno de los hijos de Fidel Castro ayudó a sacar de Cuba cuando huyó de la isla en el 2002.

Dashiell Torralba, la ex novia de Antonio Castro Soto del Valle, compartió el video con Univisión23 para la serie especial La vida secreta de Castro.

“Lo guardé al principio como un recuerdo”, dice Torralba en la entrevista televisada. “Pero ya después, en vista de que no veía luz por ningún lado, mi cabeza empezó a pensar en que esto podía ser algo como una forma como para hacerle llegar a Dalia todo el daño que ella me había hecho”.

En el video se pueden ver a niños jugando en jardines o posando frente a una piscina.

También se pueden ver imágenes de un hombre, que parece ser Fidel Castro, y una mujer que parece ser su esposa Dalia, comiendo en una gran mesa junto con sus hijos y nietos. A Castro se le ve vestido con una camiseta negra en una esquina de la mesa mientras su esposa acomoda platos y sirve la comida.

Según varios artículos publicados en páginas de Internet sobre Cuba, el complejo conocido como Punto Cero está en el municipio Playa, provincia Ciudad Habana, en la calle 232 en Jaimanitas, en lo que era un antiguo campo y club de golf. El lugar está a unos 25 kilómetros de La Habana y tiene un área de aproximadamente 75 acres.

Juan Reinaldo Sánchez, quien fue escolta de Fidel Castro durante 17 años, habló de Punto Cero como una de muchas propiedades del ex gobernante cubano en su revelador libro La vida oculta de Fidel Castro, publicado originalmente en francés en junio del 2014.

“A lo largo de toda su vida, Fidel no se ha cansado de repetir que no poseía ningún patrimonio, a excepción de una modesta ‘cabaña de pescador’ en alguna parte de la costa”, escribió Sánchez en su libro. “Salta a la vista que ese lugar se ha transformado en una lujosa residencia de verano que moviliza medios logísticos considerables para su vigilancia y mantenimiento. A lo cual cabe añadir otra veintena de inmuebles, empezando por Punto Cero, su inmensa propiedad de La Habana, próxima al barrio de las embajadas”.

Entre otras residencias y lugares de descanso y diversión que ha usado Castro, según Sánchez, están Cayo Piedra, cerca de Bahía de Cochinos, donde tuvo lugar la fracasada invasión de exiliados cubanos financiada y organizada por la CIA; La Caleta del Rosario, que tiene una marina privada en la Bahía de Cochinos; La Deseada, un chalet en Pinar del Río donde ha ido a cazar patos.

En la versión en inglés del libro, titulado The Double Life of Fidel Castro (La doble vida de Fidel Castro), Sánchez ofrece más detalles sobre Punto Cero.

Dice que en Punto Cero cada miembro de la familia tiene su propia vaca lechera. De esa manera, escribió Sánchez, las botellas llegaban a la mesa cada una con una etiqueta numerada.

Por ejemplo, dice Sánchez, la botella de Antonio, uno de los hijos de Castro con Dalia, llevaba el No. 8, mientras que la Fidel Castro tenía el No. 5.

Además, agrega Sánchez en el libro, Punto Cero requiere de cuatro jardineros para mantener los árboles, plantas y flores de la estancia. Según Sánchez, Punto Cero tiene también seis invernaderos donde se cultivan frutas y legumbres.

Dos cocineros preparan los alimentos que un mayordomo sirve a la familia, dice Sánchez.

“Con sus árboles de naranjas, limones, mandarinas, toronjas y plátanos, el lugar se asemeja al jardín del Edén, especialmente si se le compara con el requerimiento para el resto de los cubanos, incluyendo a los escoltas de Castro, de usar la libreta de racionamiento para comprar alimentos”, dice Sánchez, quien murió en Miami en mayo del 2015 a los 66 años.

Un articulo de Luis Domínguez en la página de Internet Llamado 32/Secretos de Cuba, dice que originalmente el campo de golf se llamaba Jaimanitas Club en la década de 1920. Luego, alrededor de 1933, dice el artículo, se convirtió en el Havana Biltmore Yacht and Country Club.

Gradualmente, luego del video de Torralba, han surgido más imágenes de Punto Cero, incluso algunas que los ávidos de más información han encontrado en Google, que ofrece vistas desde el espacio en las cuales la propiedad se asemeja a un complejo de residencias en un área suburbana.

También se ha podido observar en diversas fotos el interior de la casa cuando Castro se ha reunido con líderes extranjeros o visitantes prominentes.

Se observa mayormente un solo salón, que bien podría ser la sala, o un estudio donde Castro recibe a visitantes o donde escribe sus periódicas columnas, Reflexiones del compañero Fidel, que van desde comentarios sobre el presidente Barack Obama hasta el yoga.

Un visitante conocido que ha estado en Punto Cero para ver a Castro fue el presidente ruso Vladimir Putin, que fue fotografiado en el lugar en julio del 2014. En la foto con Putin, publicada en todo el mundo, Castro y el líder ruso se ven en una habitación donde hay una pintura grande enmarcada en una pared y al fondo se puede ver lo que parece es un reloj redondo en otra pared y una maceta colgada en la pared junto al reloj.

Cuando el papa Francisco se reunió con Castro en Punto Cero en septiembre del 2015, la foto que se distribuyó muestra a Castro sentado junto a su esposa Dalia frente al Papa. Atrás se ve la misma pintura de las flores amarillas.

Otro visitante prominente fue Luiz Inácio “Lula” da Silva, ex presidente de Brasil, que en una foto del 2010 publicada en la página Habana Memorias se le ve hablando con los hermanos Castro junto a lo que se describe en el pie de foto como la “ostentosa piscina” en Punto Cero. Detrás de la piscina se ve una casa de dos pisos.

En una imagen de enero del 2014, se ve a Castro recibiendo al presidente mexicano Enrique Peña Nieto en la misma sala donde se veía la lámpara estilo candelabro y obras de arte colgadas en la pared, con una maceta llena de flores moradas.

En otra foto, de agosto del 2014, se ve a Castro hablándole a un niño vestido con uniforme y al lado izquierdo del ex gobernante se observa una mesita donde encima se ve una botella de plástico con agua y una banderita, y debajo varios libros.

El niño posteriormente fue identificado como Marlon Méndez Cabrera, de 8 años en ese entonces, que coleccionaba fotos de Castro y había llenado una pared de su casa con más de 200 imágenes del ex líder cubano.

Los medios describieron a Marlon como “ejemplo supremo de la famila revolucionaria entregada a la veneración del patriarca en retiro”.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *