La amnistía para lo que el régimen de Daniel Ortega considera crímenes es vista como una solución a uno de los cuatro grandes temas de las negociaciones con la opositora Alianza Cívica
El régimen de Nicaragua propuso una amnistía para las personas que han cometido lo que califica de crímenes durante la crisis sociopolítica que afecta al país, informó este lunes la contraparte opositora del Ejecutivo en las negociaciones para encontrar una salida al conflicto interno.
«Se nos ha adelantado que el Gobierno insiste en la idea de la promoción de una amnistía como solución jurídica», dijo el representante de la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, Juan Sebastián Chamorro, a periodistas.
La amnistía para los crímenes son vistos por el régimen como una solución a uno de los cuatro grandes temas de las negociaciones, como es la justicia para las víctimas de la crisis, según los opositores.
Chamorro afirmó que la Alianza no acepta la propuesta del régimen, ya que «la solución al tema de la justicia es más complicado que eso».
Esta misma mañana el papá del líder estudiantil Edwin Carcache, del mismo nombre, afirmó que «no cabe la amnistía, porque los ‘presos políticos’ no cometieron delitos, lo que el Gobierno pretende con eso es liberar (de acusaciones legales) a su gente, a los paramilitares».
Según el informe del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), adscrito a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), el mayor responsable de la violencia que ha dejado cientos de muertos es el régimen del presidente Daniel Ortega, que a mediados de 2018 se valió de policías y fuerzas «parapoliciales» con armas de guerra, para atacar a civiles.
El GIEI ha insistido en que el régimen de Nicaragua ha cometido crímenes «de lesa humanidad» contra las personas que se le oponen, y la CIDH ha confirmado «violaciones sistemáticas» a los derechos humanos.
Chamorro insistió en que una amnistía en estas condiciones no sería lo adecuado, y señaló la necesidad de que se instaure «una verdadera Comisión de la Verdad, no la que tenemos (oficialista)», para establecer «una política pública de reparación ética, moral, económica, incluso psicológica» para las víctimas y sus familias».
La propuesta de amnistía sería un tema de discusión en la mesa de negociaciones entre el régimen de Nicaragua y la Alianza Cívica, que se encuentra suspendida oficialmente desde el 3 de abril pasado, aunque las partes sostienen reuniones para su posible restablecimiento.
Nicaragua atraviesa una grave crisis que ha dejado 325 muertos desde abril de 2018, de acuerdo con la CIDH, aunque algunos grupos elevan a 568 las víctimas mortales, mientras que el Ejecutivo solo reconoce 199 y denuncia un intento de golpe de Estado.
La CIDH también reporta decenas de miles de exiliados, así como 809 «presos políticos», casi el doble de los que admite el Gobierno.
FUENTE: Con información de EFE
